Lectura del viernes 28 de junio de 2024 - Señor, si quieres, puedes purificarme

Viernes de la duodécima semana del Tiempo Ordinario

Evangelio según San Mateo 8,1-4.

Cuando Jesús bajó de la montaña, lo siguió una gran multitud.

Entonces un leproso fue a postrarse ante él y le dijo: “Señor, si quieres, puedes purificarme”.

Jesús extendió la mano y lo tocó, diciendo: “Lo quiero, queda purificado”. Y al instante quedó purificado de su lepra.

Jesús le dijo: “No se lo digas a nadie, pero ve a presentarte al sacerdote y entrega la ofrenda que ordenó Moisés para que les sirva de testimonio”.

Twitter, Facebook